El 8 de mayo fue un día histórico para la Iglesia Católica: Robert Francis Prevost fue elegido pontífice y asumió el nombre de León XIV. Su perfil refleja la continuidad de un camino reformista y una fuerte vocación de servicio a las comunidades desde su pertenencia a la Orden de San Agustín.
Un papa con mirada agustiniana y alma latinoamericana
Desde este miércoles, la Iglesia tiene un nuevo guía espiritual. En el Vaticano, tras la segunda votación del cónclave, el humo blanco anunció que el consenso había sido alcanzado: Robert Francis Prevost es el nuevo papa, León XIV.
Tiene 69 años y es el primer pontífice que posee nacionalidad peruana y estadounidense. Además, es miembro de la Orden de San Agustín, congregación a la que se unió en 1981. Esta elección no solo rompe fronteras geográficas, también introduce una dimensión espiritual inédita, al ser el primer papa de formación agustiniana en la era moderna.
El legado agustiniano en su trayectoria
Prevost se formó como teólogo en Chicago, pero fue en Roma donde profundizó su perfil intelectual. Obtuvo el doctorado en Derecho Canónico en la Pontificia Universidad de Santo Tomás de Aquino, con una tesis centrada en el rol del prior local dentro de su orden.
Este trabajo no se quedó en el plano teórico: fue una expresión de su apuesta por una Iglesia participativa, descentralizada y en diálogo con el pueblo, inspirada en San Agustín. Ese enfoque marcó su acción pastoral por décadas, comenzando en la misión de Chulucanas, Perú, y extendiéndose por distintas regiones de América Latina y EE. UU.
Además de su experiencia local, Prevost se consolidó como figura clave en el Vaticano. Fue prior, formador, docente y, en 2023, prefecto del Dicasterio para los Obispos y presidente de la Comisión Pontificia para América Latina. En ambos roles, demostró su compromiso con una Iglesia transformadora.
Sus posiciones han estado en sintonía con las reformas del papa Francisco, que busca una Iglesia menos centrada en estructuras y más conectada con la realidad de los pueblos.
Una elección cargada de sentido comunitario
El nombramiento de León XIV no fue una simple decisión estratégica, sino una reafirmación de principios esenciales. Como agustino, simboliza los valores de interioridad, servicio y vida en comunidad. En su primera intervención pública, Prevost llamó a una Iglesia que “escuche, sirva y camine junto a su pueblo”.
El anuncio fue recibido a las 7 p. m. (hora de Roma) con emoción en la Plaza de San Pedro, y la noticia se celebró especialmente en América Latina, donde sus raíces pastorales siguen muy presentes.
¡León XIV es el nuevo #Papa!
— Vatican News (@vaticannews_es) May 8, 2025
El Cónclave ha elegido al 267º Obispo de Roma, el Cardenal Robert Francis Prevost . El anuncio ha sido dado a la multitud por el Cardenal Protodiácono Dominique Mamberti.https://t.co/BZgdoBjr8M pic.twitter.com/hLpmGAygS0
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